El concejal de Obras y Servicios Operativos, César del Espino, ha desmentido hoy en rueda de prensa que en las obras de la pista cubierta colindante con el colegio público Antonio Machado se haya producido "un error de cálculo en el proyecto", como señaló el portavoz de IU, Miguel Villa, el pasado lunes, y ha desligado el evidente retraso de los trabajos de esta circunstancia.
Sobre el primero de estos asuntos, Del Espino ha indicado que el arquitecto redactor del proyecto y director de las obras, Manuel Roldán, ha presentado un modificado del proyecto en el que recomienda la sustitución del material inicialmente previsto y presupuestado para la cubierta por otro de mayor grosor, "siguiendo las indicaciones realizadas por la empresa suministradora, con posterioridad a la adjudicación, en aras a una mayor seguridad de la instalación". Del Espino ha descartado que este cambio se deba "a un error" en el proyecto, y ha adelantado que los técnicos estudiarán la modificación sugerida y la aprobarán si se estimará conveniente, "aunque la misma no podrá superar un 15% del proyecto inicial –adjudicado en 239.580 euros– en cuyo caso tendría que ser objeto de una nueva licitación".
Respecto a la marcha de la intervención, Del Espino ha asegurado que "las obras no están paralizadas, aunque es cierto que van a un ritmo muy lento" y reconocía que los trabajos no podrán concluir a primeros de mayo como estaba previsto en el contrato suscrito con la empresa adjudicataria Sepisur XXI, aunque indicó que el grado de ejecución de obra supera el 50 por ciento, aunque el del presupuesto se queda en el 15% señalado por Miguel Villa, "dado que en este proyecto, la mayor parte del coste corresponde a la estructura y la cubierta de acero".
En cualquier caso el edil socialista ha mostrado "la preocupación del equipo de gobierno" por el lento ritmo de los trabajos y ayer se celebró una reunión urgente con la dirección de obra y la empresa adjudicataria "para pedir explicaciones".
Según Del Espino –que no ha querido poner plazo a la finalización de los trabajos– las razones que ha ofrecido la empresa como justificación al retraso y a la petición de una prórroga "no parecen admisibles", aunque serán estudiadas y "si hubiera un incumplimiento, se penalizará económicamente, como marca la ley".
El concejal de Obras ha indicado que "en este momento no se están dirimiendo responsabilidades, cada parte tendrá que acreditar las causas del retraso o la modificación del proyecto solicitada, se estudiará y se determinará lo que corresponda".
Para César del Espino, Miguel Villa "miente al acusar al equipo de gobierno de oscurantismo o secretismo, ya que si algo caracteriza a este grupo es la transparencia". Según el responsable municipal de Obras, "la mejor prueba de ello es que el propio Villa tiene todos los datos" por lo que indicó que "su único interés es sembrar discordia entre los ciudadanos".