El Ayuntamiento acaba de adjudicar las obras para la creación del cementerio ecológico de Lucena. La empresa Azogue Ingeniería SL ha resultado adjudicataria del concurso público convocado por el consistorio lucentino para la ejecución de estos trabajos, tras presentar una mejor oferta de 85.902 euros, por debajo de los 99.540 euros contemplados en el pliego de licitación.
La empresa contará con un plazo de ejecución de solo tres meses a partir de la formalización del contrato en los próximos días.
La iniciativa es fruto del acuerdo alcanzado en su día con el grupo municipal Ciudadanos, precursor de la misma, con motivo de la aprobación de los presupuestos municipales del pasado año y se implantará sobre una de las terrazas del actual cementerio municipal de San Jorge, sobre una superficie total de 2.816 metros cuadrados, contemplando dos ámbitos de actuación: una calle de acceso, situada justo a la entrada del actual camposanto, a la derecha, y una terraza en la que se ubicará las 43 primeras parcelas de este cementerio ecológico, de 3x2,5 metros cuadrados, situadas en torno a una calle central cubierta con una pérgola.
Cada parcela estará dedicada al depósito de urnas biodegradables en las que las cenizas procedentes de la cremación de un cadáver se fundirán con el esqueje de un árbol –almez o algarrobo, que son especies de rápido crecimiento y escaso mantenimiento–
Además se incluyen unas áreas de descanso en la propia vía con pérgolas y mobiliario que sirven de apoyo de la intervención.
En función de la acogida de esta experiencia pionera, se determinará la posibilidad de ampliar el área destinada a estos usos, existiendo disponibilidad de nuevos terrenos para ello.
ECO-CEMENTERIOS
Los "eco-cementerios" son desde hace años una práctica habitual en países anglosajones como el Reino Unido, Estados Unidos, Canada, Nueva Zelanda y Australia, ofreciendo una nueva experiencia a aquellos que deseen utilizar una urna biodegradable para depositar las cenizas del difunto. Estas urnas son enterradas en parcelas individuales, dando lugar al nacimiento de un árbol y conformando con el paso del tiempo un entorno natural ordenado, sostenible y habilitado para el uso público y el recuerdo de nuestros seres queridos, con los que no se rompe el vínculo.
La iniciativa conlleva también la modificación del reglamento municipal de cementerios, para incluir el nuevo cementerio y la creación de una tasa para el uso de estas instalaciones, como ya ocurre con otros tipos de inhumaciones.
En España el primer cementerio ecológico que existe es el Cementerio Comarcal de Roques Blanques, en plena Sierra Natural de Collserola, en Barcelona. Otras ciudades y pueblos en España han tomado la iniciativa y han creado Jardines del Reposo dentro de sus cementerios donde poder depositar las cenizas de los difuntos de forma controlada y sin dañar el entorno.