La indefinición sobre la administración u organismo que debe proceder a la licitación de las obras de la nueva subestación de energía eléctrica de Cabra pone en peligro el desarrollo urbanístico de algunas zonas de la ciudad e incluso podría convertirse en un problema para el Hospital de Alta Resolución de Lucena.
Así lo ha ratificado el concejal de Servicios Operativos, José Cantizani, que ha explicado que actualmente ENDESA se niega a conectar a la red a nuevos desarrollos urbanísticos, lo que, en la práctica, imposibilita al ayuntamiento a conceder licencias de obras en dichas zonas de expansión. "No podemos dar licencia de obra a una promoción que no tiene garantizado el suministro eléctrico y por tanto la licencia de primera ocupación", ha señalado el concejal de Urbanismo, José Cantizani, que ha confirmado que ya hay varios promotores afectados en la zona del Plan Parcial Oeste 1 y .
Cantizani ha señalado que tras sucesivas reuniones entre Endesa, los ayuntamientos de Lucena y Cabra y la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA) – dependiente de la Junta de Andalucía– la compañía eléctrica se había mostrado dispuesta a realizar la licitación y los ayuntamientos a pagar esta nueva infraestructura, cuyo coste podría situarse en torno a los 6 millones de euros. Sin embargo la nueva Ley de Contratos obliga a que el futuro suministrador sea fruto de un concurso público. Todo apunta a que finalmente será AVRA, propietaria de buena parte de los terrenos a los que debe dar cobertura este proyecto, quien licite las instalaciones, aunque por el momento el acuerdo no está cerrado y la construcción y entrada en funcionamiento de la nueva subestación de Cabra se dilatará durante un par de años.
La importancia de esta instalación para Lucena radica en que permitiría que la principal subestación existente en nuestra ciudad –ubicada en la carretera de Cabra– pueda abastecer exclusivamente a nuestro municipio, incluidas las zonas del polígono comercial de Los Polvillares, el PPO1, Sur 2 o el Plan de Actuación Urbanística "El Zarpazo", inicialmente supeditadas a la construcción de una tercera subestación que debía ser financiada por las juntas de compensación de los distintos planes parciales existentes en la zona, por el momento totalmente paralizados, por lo que el ayuntamiento ya renunció en 2013 a esta posibilidad ante Endesa.
Representantes de los ayuntamiento de Lucena y Cabra, ENDESA y de la empresa pública andaluza AVRA llevan varios años de negociaciones para intentar encontrar una solución que de momento no se vislumbra cercana y que pone en serios problemas el desarrollo urbanístico de ambas ciudades.
La subestación eléctrica de Lucena cuenta con un transformador de 132 a 25 kilovoltios y 30 megavatios de potencia, y tras las obras realizadas en 2011, con una inversión de un millón de euros, aumentó en un 50 por ciento la capacidad de la instalación, pasando de los 60 megavatios anteriores a los 90 de potencia total instalada en la actualidad.
RESPUESTA A DALDA
Por otra parte, José Cantizani ha negado las afirmaciones de Vicente Dalda sobre supuestas dificultades para que el Ayuntamiento acometa las obras a las que vendría obligado por el protocolo firmado por el alcalde con el Servicio Andaluz de Salud para la construcción del hospital. Según Cantizani es falso que la urbanización de la parcela carezca de alcantarillado y tanto la toma de agua como la conexión a la red de saneamiento están a apenas 20 metros. Respecto al cambio del trazado tendido eléctrico, el edil socialista manifestó que "puede hacerse de forma áerea o soterrada y en modo alguno llevará el tiempo apuntado por el señor Dalda".