El PP ha denunciado hoy el "altísimo coste" de la "mal llamada playa de Jauja" que, según la edil Rosario Valverde acabará siendo "una simple piscina en la que ya se han invertido casi 325.000 euros", sin descartarse que deban realizarse nuevas inversiones antes de su inauguración.
Valverde ha denunciado que han pasado varios años desde que se comenzó a hablar de este proyecto y casi tres desde que se anunció por primera vez su inauguración en agosto de 2015. En la misma línea, la edil popular ha recordado que ya en enero de 2016, el proyecto fue presentado mediante un vídeo promocional en FITUR, pese a que, hasta ahora, no ha sido posible su apertura al público debido a los múltiples problemas derivados de su construcción y de la resolución de las deficiencias que la administración autonómica ha impuesto para garantizar la salubridad de las aguas y la seguridad de los usuarios de la instalación.
Y es que según el PP "con tanto lago y tanta planta, se olvidaron o no contaron con la normativa existente al respecto". Así, finalmente, la piscina no tendrá el carácter de fluvial, dado que deberá llenarse con agua potable, dado que la Consejería de Salud no se permite el bombeo y serán los servicios del Patronato Deportivo Municipal los que se hagan cargo tanto de la depuración del agua como de los socorristas y personal sanitario necesarios.
Según ha explicado Valverde, en el último Consejo Rector del Patronato Deportivo "se aprobó la adjudicación de aproximadamente nueve monitores a dicha función, sin que se haya previsto en el presupuesto el pago de los mismos", lo que conllevará una modificación de crédito para atender a dicho gasto "con el correspondiente recorte de otras partidas o servicios previstos". Para el PP "este proyecto ha sido un despropósito desde su inicio, estando mal planteado y mal ejecutado, primero con un proyecto que no se lleva a efecto en su integridad, luego ejecutando obras fuera de proyecto y posteriormente con obras realizadas que han tenido que modificarse porque no cumplían la normativa, para terminar en una tradicional piscina de agua potable, porque hasta que se han concluido las obras no se ha solicitado el correspondiente informe de la Consejería de Salud".
Los populares han mostrado sus dudas sobre una apertura inminente de las instalaciones, en las que aún restan obras y pruebas de estanqueidad por realizarse, concluyendo que con el dinero invertido en el fallido proyecto de dotar a la zona de una playa fluvial que finalmente acabará siendo una pequeña piscina recreativa al aire libre "podría haberse construido todo un parque acuático".
Para el portavoz municipal del PP, Paco Huertas, la historia de este proyecto es la de "un episodio de despilfarro constante del PSOE".