La pasada semana concluyeron las obras que se han venido ejecutando durante los últimos seis meses en el paraje de El Cascajar por parte de la empresa Viguecons Estévez S.L. contando con una inversión de 260.000 euros.
El proyecto ha incluido la sustitución del colector de hormigón de la margen izquierda del río en la zona del Cascajal en una longitud aproximada de 200 metros con nuevos pozos de registro, así como nuevas conexiones bajo el río de varios aliviaderos, la limpieza y adaptación de otros ya existentes, eliminación de la impulsión en algunos puntos del trazado y la protección con escollera en la entrega de pluviales al Río Lucena, según el proyecto redactado por el Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, Antonio García de Viguera, por encargo del Servicio Municipal de Aguas "Aguas de Lucena".
La actuación ahora finalizada debe regular definitivamente la situación de vertidos directos al río que históricamente se ha venido produciendo en esta zona y la recuperación del cauce, completando la fallida e incompleta actuación llevada a cabo a través del proyecto anterior, en el que se invirtieron unos doce millones de euros.
Según ha indicado a LucenaHoy el concejal de Obras y Urbanismo, José Cantizani, "la empresa comunicó al Ayuntamiento el pasado viernes que da por finalizadas las obras encargadas". No obstante, el edil socialista manifestó que "en los próximos días se procederá a visitar los trabajos realizados junto a técnicos municipales antes de llevar a cabo la certificación definitiva que marcará oficialmente el fin de los mismos".
Cantizani evitó ayer manifestarse sobre la situación en la que queda este paraje tras las obras, que han supuesto la desaparición del tradicional paseo de ribera, muy degradado ya antes del inicio de las mismas por las sucesivas inundaciones del mismo y el abandono del entorno y en el que también se echan en falta varios ejemplares de la ya menguada alameda tradicional. Actualmente las márgenes del río aparecen trufadas de puntos de registro y otras construcciones hidráulicas elevadas sobre la rasante y en muchos casos rodeadas de piedras de gran tamaño. El concejal de Obras señaló que será tras la visita a las obras cuando deba determinarse si se hace necesaria algún tipo de medida correctora.
Por el momento el ayuntamiento no contempla ninguna actuación de recuperación del entorno paisajístico de esta zona de la ciudad, considerada como "zona inundable" pese a que históricamente ha sido uno de los pulmones verdes de Lucena.