La actuación más generalizada en la gran mayoría de ubicaciones consiste en el pintado de las plataformas peatonales de los todos contenedores soterrados, incluyendo el pintado de los buzones de envases ligeros. Para conseguir la mayor calidad en el acabado de las labores de pintura se están clausurando las ubicaciones dotándolas de forma provisional de contenedores de superficie.
Respecto a los buzones de orgánica/resto, fabricados en acero inoxidable, los trabajos de mejora se centran en el pulido y abrillantado in situ a cargo de empresas especializadas en tratamientos superficiales de acero inoxidable, sin que se precise su clausura provisional.
La otra actuación principal de este plan extraordinario responde a la necesidad de mejorar la accesibilidad a los contenedores para personas con movilidad reducida. En estos casos, los trabajos menores de obra civil se centran en la reposición de la solería y en reparaciones puntuales de bordillos y baldosas deterioradas o sueltas.
De forma simultánea a estas tareas de mejora, Epremasa tiene previsto comenzar en septiembre con una limpieza a fondo de todas las unidades de contenedores soterrados mediante vehículo dotado de una hidro-lavadora de agua caliente a presión, al objeto de eliminar o minimizar las manchas existentes en el pavimento circundante de las distintas ubicaciones de contenedores.
Por último, se llevará a cabo una intervención en algunos espacios singulares para integrar la imagen de los contenedores soterrados en el entorno gracias a los diseños gráficos, que en forma de vinilos se colocarán directamente en los buzones.
Para Mamen Beato, concejala responsable del área de Medio Ambiente y Sostenibilidad, "hemos conseguido priorizar junto a Epremasa una actuación que entendemos más que necesaria porque, como es normal, el servicio de recogida selectiva de los residuos sólidos urbanos produce a diario desperfectos y desgaste en los propios contenedores soterrados y sus ubicaciones en el viario público que conviene reparar".
En la primera semana de desarrollo de este plan, los resultados ya son visibles en los contenedores soterrados de la calle San Francisco esquina con calle Cervantes, donde se ha eliminado un bordillo con una altura de unos 5 centímetros que suponía una barrera arquitectónica en el acceso a las plataformas. También se ha actuado en la calle Corralas, Llano de las Tinajerías, ronda y plaza de la Fuensanta y calle Santiago.
Los trabajos se prolongarán, en base al cuadrante trazado por Epremasa, hasta los días finales del mes de octubre.