El concejal de Obras y Mantenimiento, José Cantizani, indicó ayer que el equipo de gobierno "no se plantea" por el momento retirar el jardín vertical, aunque tampoco está "obcecado" con mantenerlo a toda costa, aunque sigue pensando "que es una buena idea". Cantizani daba así respuesta a preguntas formuladas en la pasada sesión plenaria por el PP y Ciudadanos, sobre el coste de esta estructura y el problema de malos olores que viene generando en el entorno de la casa consistorial.
José Cantizani explicaba que el coste total del jardín vertical ascendió en su día a 100.093 euros, cantidad de la que un 20% fue aportada por el Ayuntamiento de Lucena y el resto con cargo a fondos europeos. El edil socialista apuntó que la empresa que lo construyó se ha hecho cargo hasta el momento de todos los requerimientos y mejoras que se han sugerido desde el Ayuntamiento de Lucena. No obstante, estando próxima a concluir la garantía de la obra, en el próximo mes de marzo, el equipo de gobierno ha sacado a licitación el mantenimiento anual del jardín por un precio de 8.000 euros más IVA, como informó en su día este periódico.
El concejal de Obras señalaba que de esta forma se prentende "dar un voto de confianza a la nueva empresa" para intentar consolidar este elemento decorativo. Además, el responsable municipal argumentó que el episodio de malos olores de las últimas semanas se debió a la poda de la instalación, aspecto con el que se mostraron en claro desacuerdo tanto la portavoz de Ciudadanos, Purificación Joyera, como el del PP, Paco Huertas, que recordaron que incluso hay escritos de queja del personal municipal sobre la situación de olores que genera el jardín en la planta sótano del edificio municipal, donde se encuentran los despachos de los distintos grupos políticos y algunos negociados. Huertas pidió que se estudie la retirada de algunas de las especies del jardín, que podrían ser la causa principal del mal olor, y su sustitución por otras.