El Sindicato de Industria de CCOO de Córdoba ha señalado hoy a través de una nota de prensa que la Inspección de Trabajo "ha dado la razón" a sus delegados sindicales en la empresa lucentina Bronpi "que denunciaron falta de medidas de aspiración de las partículas en suspensión que producen las soldaduras" que pueden ser perjudiciales para la salud.
Según expone CCOO la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social realizó la oportuna visita al centro de trabajo a raíz de las denuncias formuladas por el sindicato sobre un presunto riesgo de exposición a agentes químicos.
Tras la comprobación realizada, la Inspección ha podido constatar "deficiencias en dicha materia", comunicando al sindicato "la puesta en marcha de un procedimiento sancionador" y efectuando un "requerimiento de subsanación de las deficiencias detectadas".
En su comunicado CCOO recuerda que la denuncia de estos hechos "provocó la suspensión de empleo y sueldo, primero, y el despido después, del presidente del comité de empresa, así como la suspensión de empleo y sueldo del secretario del comité".
Según el secretario General del Sindicato de Industria de CCOO de Córdoba, Agustín Jiménez, CCOO ha tratado en todo momento de llegar a un acuerdo, señalando que el 20 de enero, con la mediación del presidente de la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO), Antonio Díaz, "se trató de llegar a un consenso con la empresa, que se negó en todo momento a reconducir la situación".
Ante la nueva situación Jiménez espera que Bronpi "reconsidere su actitud y podamos recuperar el diálogo y la negociación para solventar las cuestiones pendientes por el bien de todos, empresa y plantilla" y que "readmita al presidente del comité y no espere a que una sentencia judicial le obligue a ello".
Desde CCOO se señala que "esta situación de tensión no beneficia a una empresa que genera tanto valor para Lucena y para la provincia". En este sentido Jiménez ha hecho hincapié en que CCOO "no va contra la empresa, como ha querido hacer creer representantes de UGT".