Para Rafael Carrillo, entrenador del Lucena, solo existen dos remedios en el propósito de solventar la coyuntura crónica que padecen los jugadores y técnicos. "Una es encontrar posibilidades para que el club siga vivo y la otra es que los directivos cedan su puesto a otros gestores que sean capaces de sacar esto adelante". Aunque el preparador cordobés dijo no saber exactamente la manera de formalizar la segunda opción, que implicaría un traspaso de poderes, insistió en que las dos cuestiones que planteaba "son evidentes".
Falete confirmó que en el transcurso de la última semana ni la plantilla ni el cuerpo técnico han conseguido contactar con Eduardo Bouzón y Javier Martí Asensio, presidente y vicepresidente de la entidad respectivamente. El adiestrador del Lucena desveló, tras la derrota frente a Los Barrios, que, con anterioridad a los acontecimientos más recientes, les había desvelado a los gestores su parecer. "Les dije que gran parte de la situación actual del club es por ser ellos los dirigentes y, en ese sentido, son los que tienen que intentar buscar las soluciones".
Respondiendo de un modo pausado y franco a las preguntas, asumió como irreconciliable el divorcio entre la afición y los administradores y lo situó como causa del escaso respaldo que los futbolistas reciben en las gradas. "Yo creo que sí, el trasfondo final es ese, pero es cierto que estamos intentando hacerles ver a los seguidores que los que estamos ahora mismo no somos de Madrid, somos gente que siente al Lucena y que nos sentimos casi lucentinos, en lo que respecta a mí me siento lucentino; los chavales lo están dando todo y haciendo un esfuerzo grandísimo para dar la cara por el escudo y la localidad".
De igual forma, corroboró que los componentes del equipo han carecido de agua embotellada "desde el principio". Sin embargo, es probable que "la semana que viene" se arregle esta cuestión. Además, el pasado sábado, en el estadio Ciudad de Lucena, se produjo "una reunión informal" con el presidente y el vicepresidente del PDM. "Les dijimos nuestras inquietudes y situación y hay buen talante para poder ayudarnos".
Por otro lado, comentó que se han conseguido "concretar" algunos acuerdos con responsables de empresas que están dispuestos a colaborar con la escuadra azulona. "Nos falta todavía plasmarlo, estamos intentando buscar apoyos que nos puedan vestir en los viajes, un patrocinador para la equipación, y en definitiva, aporte económico con el que podamos sufragar gastos", apuntó Falete.
En cualquier caso, fijó el final de la primera vuelta como la siguiente fecha límite. "Una vez que termine analizaremos las circunstancias con la plantilla y tomaremos una decisión conjunta, en función de la capacidad de autogestión que podamos tener o las ayudas y la respuesta de la afición, de todo dependerá, y por supuesto de nuestros ánimos y ganas de seguir compitiendo".