El panorama del Lucena CF se aclara y las maniobras practicadas por Javier Martí Asensio y Felipe Luque, los directivos que gestionan el club actualmente, están deparando efectos positivos. Diversas fuentes involucradas en las negociaciones han asegurado a LucenaHoy que la Seguridad Social ha concedido un segundo aplazamiento a la entidad celeste para solventar una deuda fijada en 384.000. De esta forma, la institución pública cancela el embargo ejecutado contra el equipo de fútbol desde hace unos meses. Al mismo tiempo, y según las mismas informaciones, se han alcanzado acuerdos con el resto de acreedores que reclamaban cantidades superiores a los 60.000 euros por vía judicial. En base a todo lo anterior, los dirigentes lucentinistas han cumplido los requisitos que condicionaban la recepción de las subvenciones públicas, por ejemplos las referentes al Ayuntamiento de Lucena y a la Diputación de Córdoba.
No obstante, el tiempo disponible para eludir el descenso a Primera Andaluza es mínimo. La plantilla de la temporada 2014-2015 ha denunciado los salarios impagados, correspondientes a seis mensualidades, ante la AFE y el montante asciende a 80.000 euros. Dicho importe ha de satisfacerse en el transcurso del mes de junio, salvo que se convenga otro modo de pago con los afectados. La última proposición del club es abonar inmediatamente el 75% y afrontar el 25% en la primera quincena de julio, una oferta que han rechazado al menos dos integrantes del vestuario.
A fin de agilizar la rúbrica del convenio con el Consistorio, cuantificado en 60.000 euros y que, en estos momentos supone la principal vía de ingresos, Javier Martí Asensio y Felipe Luque se reunieron el pasado lunes con el alcalde Juan Pérez. Los directivos del Lucena CF le trasladaron al regidor las positivas modificaciones en la coyuntura económica.
Actualmente, las acciones más perentorias son la certificación oficial de que el club está al corriente con la Seguridad Social y Hacienda, requisito calificado de indispensable en el acuerdo que adoptó la Administración Local puesto que la finalidad del mismo –al menos en un 70%- es consumar las retribuciones a los futbolistas. Por otra parte, el secretario y demás técnicos han de pronunciarse sobre la obligatoriedad de que el pacto sea nuevamente estudiado por el consejo rector del Patronato Deportivo Municipal, organismo autónomo encargado en esta ocasión de librar el dinero, antes de que lo suscribiera el presidente del mismo, Manuel Lara Cantizani. Asimismo, y debido a que el documento se redactó unos meses, habría que analizar qué ocurre con algunas cláusulas ahora caducadas, como la que establecía el fraccionamiento de la contribución en cuatro entregas de 15.000 euros. En todo caso, la postura de ambas partes es constructiva y no se descarta que las dificultades reseñadas se solventaran antes del 30 de junio, lo que significaría la consecución de una liquidez decisiva para continuar en Tercera División.
Más complicada se vislumbra la aceptación de una partida presupuestaria procedente de la Diputación de Córdoba. El acercamiento con el mencionado ente se produjo, solo de un modo verbal, entre componentes de la anterior junta gestora y responsables del equipo de gobierno que ha cesado recientemente. En este contexto, el procedimiento mediante el que se obtendría una suma en torno los 30.000 euros precisaría de diferentes e ineludibles trámites.
MANUEL GONZÁLEZ