La Real Archicofradía de María Santísima de Araceli celebró este fin se semana su Asamblea General de Hermanos. En el transcurso de la misma, se expuso que el proyecto de construcción de columbarios en el Real Santuario, aprobado por Junta General del 22 de septiembre de 2013, se realizará finalmente en el 'salón de los arcos', tras el estudio realizado por los arquitectos Manuel Roldán del Valle y Manuel Roldán Fernández, quienes han realizado un estudio die accesibilidad al espacio que posibilitará la entrada desde la tienda de recuerdos aracelitanos tanto a los columbarios como al Camarín.
El proyecto de columbarios en el Real Santuario de Aras, que será presentado en el mes de octubre, cuenta con un total de 520 columbarios que se construirán en distintas fases, iniciando las obras el próximo año, de forma que en el mismo año puedan entregarse a quienes los adquieran.
Esta iniciativa permitírá a los devotos de María Santísima de Araceli descansar junto a la Patrona de Lucena y, por otra parte, serán una fuente de ingresos para el mantenimiento del Real Santuario de María Santísima de Araceli, la Casa Museo de la Virgen y el patrimonio aracelitano.
NUEVAS BAMBALINAS ROJAS
El Hermano Mayor, Rafael Ramírez Luna, explicó que en el Taller de María se realizarán unas nuevas bambalinas rojas para el paso de la Virgen de Araceli. Ramirez explicó que para sufragar los costos de este proyecto se están vendiendo unas estampas de la Virgen de Araceli con los flecos que se quitaron en la restauración del manto rojo.
Por otra parte, para la estancia de María Santísima de Araceli en Lucena se presentó el proyecto de dosel diseñado por José Daniel Henares Paredes, siguiendo el diseño de las coronas de María Santísima de Araceli. El dosel se elaborará en madera dorada y con el mismo se pretende conseguir un conjunto armónico que cumpla con el fin de enmarcar a la imagen sin ocultar el retablo.
Asimismo, se aprobó por unanimidad la Memoria Anual y las Cuentas de 2016, así como la unificación de los recibos domiciliados en la misma cuenta con el objeto de reducir las comisiones que se abonan a las entidades bancarias por la emisión de esos recibos.